Trump aboga por la labor conjunta con Rusia para solucionar los problemas mundiales
WASHINGTON (Sputnik) — El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, apostó por el trabajo conjunto con Rusia para resolver las crisis que vive el mundo.
“Creo que deberíamos trabajar juntos para resolver (los problemas de) Siria, Corea del Norte, Ucrania y el terrorismo”, dijo Trump en una rueda de prensa conjunta con su par vietnamita, Tran Dai Quang, en Hanói.
El líder norteamericano agregó que si Rusia ocupase una posición más amistosa saldría ganando el mundo entero.
Trump se pronunció también por las buenas relaciones con China, Vietnam y otras naciones.
Elecciones en EEUU y supuesta injerencia rusa
El presidente de EEUU, Donald Trump, dijo que se fía de los informes de inteligencia nacional sobre la supuesta intromisión de Rusia en las elecciones estadounidenses.
Durante una rueda de prensa conjunta con el presidente de Vietnam Trump se mostró convencido de que su homólogo ruso, Vladímir Putin, “piensa que él y Rusia no se entrometieron en los comicios”.
“Acerca de si me lo creo o no, estoy con nuestras agencias (de inteligencia)”, añadió el mandatario estadounidense.
De las 17 agencias de inteligencia estadounidenses, recordó Trump, solo cuatro llegaron a la conclusión de que Rusia había interferido en las elecciones.
Vladímir Putin, al conversar con Donald Trump en los márgenes de la cumbre del Foro APEC en Vietnam, volvió a rechazar en términos categóricos las alegaciones de la presunta intromisión rusa en los procesos electorales estadounidenses.El Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés) y el Congreso de EEUU llevan a cabo una investigación sobre los supuestos lazos del presidente Donald Trump con Rusia y la intromisión rusa en las elecciones presidenciales estadounidenses de 2016.
Rusia sostiene que todas las acusaciones a este respecto son infundadas.
Las disputas en el mar del Sur de China
El presidente de EEUU, Donald Trump, ofreció de visita en Vietnam su mediación para dirimir las disputas en el mar del Sur de China.
“Si puedo ayudar con mediación o arbitraje, hágamelo saber por favor… soy un mediador muy bueno”, dijo el mandatario estadounidense al presidente vietnamita, Tran Dai Quang.
Varias áreas del mar del Sur de China, al que corresponde una tercera parte del tráfico mundial de mercancías y cuya plataforma es rica en recursos naturales, son disputadas por Brunéi, China, Filipinas, Malasia y Vietnam.En particular, Pekín reclama el derecho a construir instalaciones militares en el archipiélago Spratly (Nansha, en chino), un centenar de islotes y arrecifes esparcidos en un área de más de 400.000 kilómetros cuadrados en este mar.
El archipiélago es objeto de litigio entre China, Filipinas, Malasia, Taiwán y Vietnam que han ocupado algunas islas y reclaman partes o la totalidad de este territorio. También Brunéi ha marcado su presencia en algunos arrecifes del archipiélago, sin reclamarlos formalmente.La Corte de Arbitraje Internacional de La Haya dictaminó en julio de 2016, a petición de Filipinas, que no existe una base legal para las reclamaciones que presenta Pekín en la zona marítima comprendida dentro de “la línea de nueve puntos” en el mar del Sur de China.
Además dispuso que Spratly no son islas y no conforman una zona económica exclusiva, pero China respondió que no reconoce y no acepta ese dictamen de La Haya.
El problema de Corea del Norte
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reiteró su llamado a las naciones del mundo entero a incrementar la presión sobre Corea del Norte.
“Todos los países responsables deben actuar juntos para que el Gobierno paria de Corea del Norte deje de amenazar al mundo con la muerte de mucha gente”, dijo Trump.
Las declaraciones del líder norteamericano vienen después de que trascendiera que el Gobierno norcoreano entregó en octubre una carta a la presidenta del Senado ruso, Valentina Matvienko, en la que expresaba la disposición de Pyongyang de lanzar un ataque nuclear contra Estados Unidos.El mensaje remitido al presidente ruso, Vladímir Putin, fue transmitido por la comitiva norcoreana que asistió ese mes a la asamblea de la Unión Interparlamentaria en San Petersburgo.
En ese entonces Matvienko afirmó que la delegación norcoreana le había entregado “el original de la reacción” de Kim Jong-un a la primera intervención de Trump en la ONU en la que el mandatario norteamericano amenazó con borrar a Corea del Norte de la faz de la tierra si no renunciaba a su programa nuclear.
La tensión entre Corea del Norte y Estados Unidos se agravó últimamente debido a las pruebas nucleares y balísticas de Pyongyang y los ejercicios militares que Washington y Seúl realizan con regularidad en la península de Corea.El Pentágono mantiene en territorio surcoreano cerca de 28.000 soldados.
Pyongyang sigue incrementando su capacidad nuclear y balística pese a las duras sanciones del Consejo de Seguridad de la ONU.
En julio Rusia y China se pronunciaron por declarar una moratoria simultánea sobre el programa norcoreano de misiles y armas nucleares y los ejercicios conjuntos a gran escala de EEUU y Corea del Sur para reducir la tensión.
Washington afirmó a mediados de agosto que no piensa renunciar a los ejercicios militares en la península de Corea, rechazando así la iniciativa.
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